20030520. Gallardón y Botella.
He constatado un curioso error histórico en un folleto que circula profusamente por Madrid en estos días finales de la campaña electoral. Junto a la foto de la cabeza de Gallardón metida en una botella, afirma “Gallardón, emBOTELLADO, será otro Aznar garantizado”, deduciendo que, que siendo él presidenciable, “ella hará de alcalde”.
Es una probabilidad y opinión discutibles, como todas. Pero el escrito concluye que así tendremos “tras el Pepe Botella, la Botella del PePé”, cuando, de hecho, el rey francés impuesto por Napoleón era más “liberal”, más moderno que Fernando VII, mientras que si Gallardón es del Opus Dei, Ana Botella es aún menos moderna, como muestran tanto el ser miembro de los Legionarios de Cristo como sus actos y declaraciones más recientes.
20030612. El golpe a la democracia madrileña.
Desde un gran diario barcelonés se ha llegado a afirmar que es el mayor ataque a la democracia tras el golpe del 23-F. Y todos los diarios madrileños, incluso los más afines al PP, han editorializado que “así no” se puede llegar a gobernar. Pero Esperanza Aguirre, según su conocida trayectoria, ha tenido el valor de insistir en que de ese modo “se salva la democracia” (es decir, su puesto), que el fin justifica los medios, aunque sea mediante la corrupción de los diputados autonómicos del partido contrario en Madrid.
La víctima directa de esa traición de los tránsfugas es el PSOE, y Simancas está ya asumiendo, en parte al menos, sus responsabilidades por haber dado ocasión a que se produzca el escándalo; pero la víctima última es la democracia y toda la ciudadanía, que también debe asumir su responsabilidad por haber permitido, con la abstención de unos, la permisibilidad ideológica de otros, y la complicidad directa de algunos, en esa vergüenza que nos salpica a todos.
P.D. La trayectoria posterior de Aguirre y sus secuaces ha sido del todo coherente en su corrupción.
20030613. Corrupción “salvadora” de Aguirre.
Desde tiempos de Franco no me sentía tan abochornado por nuestro sistema político. Los detalles que se van conociendo sobre los diputados traidores del PSOE de Madrid no permiten consolarse con los porcentajes estadísticos que dirían que, 2 entre 47, los Judas en ese partido todavía son “sólo” la mitad proporcionalmente que en el Colegio Apostólico escogido por el mismo Jesús.
Pero aquí sí que ha ganado de verdad, aunque no como pretende, el PP, ya que su mismo Jefe (Jefa), con el apoyo explícito de muchos de sus apóstoles y “nemine discrepante”, se ha mostrado más que dispuesta a aprovechar esa canallada para traicionar ella también a la democracia, con la eterna excusa de todos los autoritarios y corruptos, de hacerlo para salvarla, “sacrificándose para cumplir con el verdadero deseo popular”. Sólo le ha faltado decir a Esperanza Aguirre que lo ocurrido era un milagro de Dios para salvar a Madrid de la coalición radical-atea. ¡Qué vergüenza!
20030615. La policía no aparece.
Al pasar por la calle Hilarión Eslava, 44, el día 13 de junio, recibí una asquerosa ducha de agua sucia proveniente del primer piso, de unas macetas mal regadas que inundaban de agua también el toldo de un mesón y formaban un charco en el suelo. Increpé a los del piso, pero sólo conseguí que otro vecino me advirtiera que lo hacían siempre y nunca respondían a las reclamaciones.
Llamé entonces al 092, venciendo mi reticencia, porque tampoco la policía me había siquiera respondido al teléfono en otras ocasiones en que reclamé su debida asistencia. En esta, a la tercera tentativa con mi móvil, conseguí hablar con una recepcionista, que me prometió enviarme una patrulla, a la que debía esperar delante de la casa. Esperé en vano durante más de media hora, debiendo irme después a mis ya demasiado desatendidas obligaciones, indignado de este nuevo agravio, ahora por parte de quienes, por su dejadez en cumplir con su deber, contribuyen a hacer de Madrid una ciudad en la que impera la ley de la selva, campando impunemente los desaprensivos de todo tipo, como aquí, éste, que ni siquiera gritó el clásico “¡Agua va!”, mientras que la policía, ni va.
20030617. Manzano, mezquino.
Una vez más, justo al marcharse, Álvarez del Manzano ha puesto al desnudo la pequeñez, la mezquindad de su alma, al pedir que un día se le tenga que recordar… porque un parque lleve su nombre; como ya, hace pocos meses, al borrarle Aznar de la candidatura a la alcaldía de Madrid, no tuvo empacho en mendigarle públicamente que le diera a cambio al menos un puesto en “algún consejo de administración” (¡!).
Un comentarista le responde a Manzano que, para que se le recuerde, lo que hay que hacerle es un monumento con una zanja, de esas con las que tan costosa y, con frecuencia, tan inútilmente ha enterrado Madrid; yo preferiría que se le dedicara el último bolardo de los innumerables con los que ha erizado Madrid, convirtiéndolo en una ciudad inhóspita, agresiva contra los invidentes, miopes e incluso contra el conjunto de los ciudadanos, que tantos y –con demasiada frecuencia- tan dolorosos golpes recibimos a diario cuando, distraídos por una u otra causa, no los vemos por su baja estatura y tropezamos con las piernas o los pies con su metálica e inmisericorde estructura.
Esperemos que Ruíz Gallardón nos haga olvidar pronto también aquí, con su mejor hacer, estas crueles estacas por las que sí recordaremos largo tiempo después de su esperada desaparición al, en esto tan simbólicamente también, duro Manzano, un hombre sin piedad, que en vano ha intentado ocultarlo multiplicando su asistencia ostentosa a múltiples ceremonias religiosas: “Misericordia quiero, y no sacrificios”, leemos en las Sagradas Escrituras.
P.D. Los bolardos, en efecto, fueron eliminados. Pero Ruíz Gallardón, en más de un sentido, fue aún peor que Manzano.
20031021. Aguirre miente y miente.
Según dice la Biblia, “nadie es bueno, sino sólo Dios”; y uno se siente inclinado a pensar que aún son menos buenos aquellos que ejercen de políticos, máxime si consiguen escalar un rango que les permita aspirar a la Presidencia de la Comunidad de Madrid respaldados por un –cualquier- partido.
Eso supuesto, hay distintos grados de perversión. Y aprovechar la existencia de dos traidores para intentar colarse en lugar del político contrario, legítimamente elegido, parece algo así como querer suplantar a Jesús porque entre doce apóstoles tuvo un traidor (y sería así doblemente culpable, o inepto, que Simancas, que tuvo dos Judas entre 47 diputados) Por si no bastara este gesto poco “noble” de intentar colarse con una traición, con la agravante de haber pagado a los traidores unos ladrones (perdón, especuladores) que prefieren que mande Aguirre y no Simancas, se están dando estos días otros hechos, cada vez más reveladores.
En efecto: la señora Aguirre calla, no considera oportuno revelar su patrimonio. La señora Aguirre insiste en callarse aún más, y se niega a tener debates cara a cara con otros candidatos. Y cuando se decide a hablar, la señora Aguirre no tiene empacho en mentir del modo más descarado para intentar desacreditar a su oponente, como cuando dice que su propuesta transporte colectivo gratuito para ciertos colectivos en absurda “porque no existe el gratuito total, pues el dinero siempre sale de alguna parte”, cuando 1) Simancas ya había señalado bien claro de donde lo sacaría: de no quitar los impuestos a las grandes herencias y 2) En el mismo programa del PP de hace poco, y siendo Esperanza Aguirre también candidata, se ofrecía ese transporte gratuito.
Si antes de obtener el voto ciudadano esa “noble” mujer miente hasta ese punto, cuando no se niega total y desdeñosamente a hablar a los “plebeyos” ¿qué podemos esperar que haga si consigue la mayoría absoluta? Por eso, a pesar de todo, tapándome la nariz, porque ninguno de ellos me convence –pero “todavía hay clases”, grados, ningún hombre es bueno, pero alguno resulta ser realmente PPeor- el 26 de octubre iré a votar a alguno de los que pueden ayudarme a pararle los pies a la señora condesa, pero tan poco noble, Esperanza Aguirre.
20031104. El PSOE, sin protestas ni dimisiones.
A mí me pareció explicable el que los militantes del PSOE persiguieran con pancartas en que pedían su dimisión a Tamayo y Sáez, pidiendo su dimisión, cuando perdieron por su fuga el gobierno de la Comunidad de Madrid. Lo que me asombra es que, a pesar de haber leído con atención la prensa tras las recientes elecciones, no haya habido la más mínima manifestación ni demanda de dimisión ante la sede de la Federación Socialista Madrileña por no haber asumido sus propias responsabilidades y haber propiciado por segunda vez en pocos meses la pérdida del gobierno.
Está visto que incluso los más militantes y constantes votantes del PSOE han preferido también –como sus abstencionistas- quedarse en sus casas, dejando así hasta para un futuro previsible la casa de gobierno, a todos los niveles, al PP. Éste podrá ahora, sin miedo a las consecuencias, hacer decretazos a diestro y siniestro (más bien siniestros hacia la diestra), hundir otra vez y con mayores perjuicios ajenos el barco de su prestigio, o emprender otra guerra preventiva que bata de nuevo el récord de ser la más injusta e impopular de nuestra historia.
P.D: La historia posterior ha mostrado el resultado de esa pasividad.
20031105. Gallardón facilita la boda del príncipe.
¡Qué gran político es Gallardón! Ha agradecido al príncipe el que se case en Madrid. Pero ha callado su papel en esta boda, al elevar nada menos que un cincuenta por ciento el impuesto a las viviendas deshabitadas. Y, dadas las dimensiones principescas de su vivienda, esto no puede menos de haber pesado realmente en que don Felipe tomara una decisión que otros motivos no habían sido capaces de llevar a feliz término. “No hay mal que por bien no venga”.
20031209. La bodeguilla de Botella.
Es tan indignante como poco sorprendente. Si el Palacio de la Moncloa, incluso con su bodeguilla, le pareció incómodo para albergar a toda una Botella, quejándose públicamente de ello ¿qué de extraño tiene que la señora del todavía presidente del Gobierno se gaste los millones de “su” Departamento de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Madrid en hacer un palacio a su medida, que le sirva de oficina?