Cartas a la prensa – Política – Social – 2009

20090106. Ramblas.

Al salir de un banquete de Navidad, la señora Barber –con las entrañas llenas también de cristiana caridad- dice que contó en Las Ramblas más de doscientas personas entre inmigrantes que vendían latas de cervezas y prostitutas, en su mayoría negras, solicitando en la prensa que los expulsen porque “afean el paseo más bonito del mundo”.

Es difícil encontrar ejemplo más antológico y triste del más feroz egoísmo racista y pseudo patriótico, de lo más anticristiano y antihumano. Tras oírla, yo sé, señora Barber, quienes son los que afean más Barcelona, antaño reputada por su hospitalidad. Y recuerde que el mismo Jesús envió justamente al infierno al rico Epulón, que no daba ni las migajas de su banquete al pobre Lázaro, aunque Epulón no se proclamaba cristiano, ni pedía que quitaran de su puerta al pobre para que no le afeara la vista.

20090114. Contadores de muertes.

Un español ha instalado en una aseguradora de Londres un “Contador de muertes” a escala mundial. Como demógrafo, puedo tener algún interés en contrastar la relativa fidelidad de esas cifras. Pero, como ciudadano, esa publicidad me parece un pelín macabra, más propia de un convento de cartujos. Mucho más positivo, y en favor de la vida, sería concienciar a la población, como ya se ha hecho a veces, con un contador de las muertes más específico, como sería el de la principal causa de muerte evitable en nuestros países del Norte, el tabaquismo, o, a escala mundial, el hambre.

20090210. En defensa de la democracia.

Por fin, más de ocho años después de aquella vergüenza que tuvo repercusión televisiva internacional, se celebra en Madrid el juicio sobre un abuso policial que ha desprestigiado nuestra democracia. Aquel día, un domingo por la mañana, creyéndose amparados por nuestra Constitución, unos pacíficos manifestantes realizaron una sentada en las escalinatas de un Parlamento vacío y cerrado, solicitando una ayuda, no para ellos, sino para los países empobrecidos.

Ese tranquilo acto de fraternidad y, para los cristianos, de caridad, fue brutalmente interrumpido y disuelto por unos policías armados, que se ensañaron con los participantes, hasta el punto que cincuenta y nueve (59) tuvieron que ser atendidos en los servicios hospitalarios de urgencia. Ahora, ocho años después, la Justicia atiende su petición de que se restaure el orden democrático, tan radicalmente roto por esos malos uniformados, y por quien era su responsable último, el entonces Delegado del Gobierno de Aznar, y de impenitente trayectoria falangista, señor Ansuátegui.

20090526. Expulsan la justicia.

Los españoles, habiendo llegado tan tarde a participar del enorme botín que el Norte arranca al Sur, tanto en materias primas como en trabajadores explotados allí, o como inmigrantes aquí, debiéramos ser más conscientes de esa máxima injusticia planetaria. Esa sana reacción, tan justa y humanitaria, se manifestó en parte con las campañas del 0,7 del PIB, que ahora languidece en un pobrísimo 0,7 del IRPF para ciertas ONGD.
Para acallar algo nuestra mala conciencia, nos quedaban unos pocos casos en los que España apoyaba una “justicia planetaria”, para aliviar algunos de los muchos males que la corrupción política y económica fomentada desde el Norte provocaba en tantos países. Sin embargo, ahora el PP y el PSOE se han puesto de acuerdo para arruinarla, mediante un procedimiento disimulado; quizá en parte por un resto de vergüenza, demasiado poca para hacerles desistir de esa bochornosa abolición de la justicia, que se intenta tapar, como siempre, con motivos de “orden”, de “evitar exageraciones” y vanos “quijotismos”; en realidad, dan esa alevosa la patada a la justicia para que no obstaculice su complicidad con la opresión económica y política de otros pueblos. ¿Cabe mayor corrupción?

20091019. Ni pan, ni circo.

Yo estuve en la concentración por la Pobreza Cero en Barcelona: apenas 200 personas, muchas menos que en ciudades menores, y a mil leguas de las miles que reunió la manifestación de Madrid. Es evidente que faltó interés para difundir la convocatoria y por aunar fuerzas para potenciarla. En Madrid, parte del acto aprovechó hasta la cooperación de los sindicatos. Aquí en Barcelona, el ansia de protagonismo de algunos les llevó a retirar incluso parte de las pancartas de participantes espontáneos, aunque no tuvieran ninguna sigla. ¿O quizá influyó también el que sus lemas denunciaban las raíces de la pobreza, y no ponían como remedio el dar meras limosnas, bocadillos a los hambrientos? Por lo demás, el tema es suficientemente grave como para no tener que atraer y distraer a los ciudadanos con batucadas ni castellets, como hicieron los desorganizadores de ese acto. Denunciemos esa doble perversión complementaria del sistema; no se trata de dar sólo pan a los pobres, y circo al pueblo.

20091020. Chupar de los hambrientos.

Todos los años se celebra una manifestación contra la pobreza en el mundo. Sus participantes intentan concienciar a la población, con distintas pancartas y representaciones, sobre el número cada vez mayor de hambrientos -ya más de mil millones-, de la injusta distribución de la riqueza, del consumismo derrochador que agrava la situación del Tercer Mundo, etcétera. Pero este año una asociación ha llevado en Madrid varios paneles enormes, de varios metros, que situó en cabecera de la manifestación tapando lo más posible a los demás, en los que sólo figuraba las siglas de su organización y lo estupenda que era. ¿Qué pasaría si otros imitaran su mal ejemplo, convirtiendo el acto es un desfile de publicidad de organizaciones? Hasta los sindicatos, que a veces inundan con sus banderas otras manifestaciones reivindicativas, hasta hacer invisibles sus objetivos, tuvieron esta vez el pudor de no hacerlo, a pesar de cargar con gran parte del peso organizativo del acto. De verdad, ese chupar cámara a costa de los hambrientos, señores adventistas de ADRA, ¿no les da vergüenza?

20091023. Correo real extraviado.

Almas muy compasivas han enviado a la Casa Real reproducciones de pequeños fetos para pedir al rey que interceda por algunos de ellos. Pero se ha extraviado el envío, que sin duda también han hecho, de otras reproducciones de los muchos más millones de seres, personas ya hechas y derechas, cuya muerte podría evitarse fácilmente con algunos pequeños, pero reales sacrificios, no sólo de algunas mujeres, -hoy lapidadas por los nuevos y peores fariseos-, sino, del rey abajo, de todos.