20080605. Promesas famélicas.
No. Esta vez los dirigentes mundiales no han terminado antes la Conferencia de la FAO en Roma sobre la crisis alimentaria mundial para poder ver un partido de fútbol, como hace pocos años. Incluso han reconocido, como Sarkozy, que “podemos alimentar el planeta; y, con todo, cada 30 segundos muere un niño de hambre”. Y han vuelto las promesas de dinero, Zapatero, la mitad que Sarkozy. Son promesas que pocas veces se cumplen, y por cantidades ridículamente inferiores a las necesidades más vitales y también a los miles de millones que despilfarran esos mismos gobiernos en futilidades.
No es que sea sólo obscena, como dicen los comedidos ingleses, la presencia en esa Conferencia del presidente Mugabe. Lo es la de tantos otros presidentes que prometen poco y cumplen menos. Y la de corifeos que se atreven a creer que tienen la razón cuando titulan en un diario madrileño, como no harían en ningún otro país del continente, “FAO: una cumbre contra Occidente”, mientras revientan nuestros cinturones y mueren de desnutrición cada día en el mundo docenas de miles de personas, cuyos recursos, incluso alimentarios, han sido arruinados o saqueados en provecho nuestro.
20080713. Choque de crisis en las playas.
El contraste no puede ser más brutal entre los europeos, a quienes su crisis no les impide ir a descansar a las playas del sur, y los del Sur con mayúsculas, a quienes su crisis también mayúscula arroja en esas mismas playas, debilitados, enfermos, o incluso muertos.
Los muchos fallecidos, incluidos cinco niños, de una embarcación interceptada cerca de Almería, ha llevado a Zapatero a recordarnos que la situación de África es “insoportable” y “alarmante”; y que la paz social, -y hasta la paz sin más-, no puede sobrevivir a esas diferencias crecientes, incluso alimentarias. Pero hay que recordar que los remedios que propone –para no hablar de los que cumple- están siendo tan insuficientes: El objetivo del 0,7 del PIB, que la misma ONU había previsto aumentar mucho para estas fechas, no sólo es mínimo, y hoy se “cumple” sólo en parte y con muchas partidas falsificadas, según denuncian las ONGs. Y las medidas para atender a los inmigrantes aquí y frenar con el desarrollo su salida de los países de África son pocas, y están contrarrestadas por otras medidas en sentido contrario. Con esa política (anti)humanitaria, como con la –en tantos aspectos relacionada- pertinaz política (anti)ecológica, al mal presente seguirá un mucho peor porvenir cercano para todos.
20080716. Echar o quitar una mano a África.
Han causado el natural impacto las fuertes declaraciones de Zapatero sobre la “tragedia insoportable” de África, que naufraga y muere en nuestras costas. Pero el presidente sabe muy bien que él mismo dedica la mitad de su tiempo a apoyar a las multinacionales españolas en el extranjero, incluso aquellas que liquidan la industria y hasta la artesanía local, máxime en África. Y que las últimas tendencias de su gobierna agravan esa desastrosa tendencia, directamente contraria a una justa cooperación. Y que la exportación de productos alimentarios a precios artificialmente bajos desde aquí arruinan el sistema agrícola africano, produciendo perversamente hambrunas crónicas. Y que, por lo tanto, antes y más que echarle una mano, darle una limosna, hay que quitarle la que hoy se le tiene puesta encima, y que ahoga a África y a sus hijos hasta el punto de hacer aparecer sus cadáveres en nuestras playas.
20080802. Todo perfecto.
Muy razonable, la queja de un ciudadano ha sido rápidamente atendida. Las fotos en las marquesinas de autobuses de jovencitas anunciando ropa íntima podían provocar accidentes corporales, y llevar también a algunos sexualmente inflamables al infierno espiritual. Han sido rápidamente sustituidas por fotos de niños africanos hambrientos, algo que, por ser habitual, parece que conmueve menos el equilibrio psíquico y pone menos en peligro el alma por denegarles el debido y fácil auxilio. Todo perfecto.
20080831. Esto tiene tomate.
En plena crisis económica aquí, y de alimentos escala mundial, con el tomate a dos euros en España, y mil millones de hambrientos en el planeta, en un pueblo valenciano no tienen reparo en reírse sangrientamente de todos reventando, revolcándose y enguarrándose, física y moralmente, en más de cien mil kilos de tomates espachurrados. Así cumplen con una “tradición” que hasta hace pocos años estaba prohibida ahí mismo, por ser lo que es, una insoportable gamberrada, hoy masiva y oficial, es decir, incomparablemente peor. Pero las autoridades responsables la fomentan ahora por el dinero que proporciona a unos cuantos, a cuento del turismo de una turba de insensatos, que van a ensuciarse así física y moralmente a ese pueblo, en uno de los espectáculos más repugnantes que puedan imaginarse, que nos rebaja y perjudica a todos.
20080916. Rajoy, ni borracho.
Aunque trajera un certificado médico de que estaba borracho. Eso sería aún más incriminatorio. Si se considera con justicia como agravante el que un conductor atropelle a alguien estando borracho, con mayor razón debe considerarse mucho peor el que el conductor del principal partido de la oposición atropelle así brutalmente con sus declaraciones a millones de inmigrantes; hasta el punto de criticar que 180.000 estén cobrando el paro –para lo que han cotizado- mientras subsiste la tan tradicional migración temporal de algunos miles de españoles a la vendimia francesa. En vano, ante las innumerables protestas, Rajoy balbucea después vanas y cobardes excusas, sin desdecirse de verdad ni pedir perdón por su barbaridad. Tan tremendo atropello, tan grave daño a la convivencia, no merece sino que se le retire de por vida el carné de conducir políticamente, es decir, el poder ser elegido en las urnas; por el bien de todos, y de su propio partido.
20080929. Represión corporal.
Comprendo la angustia de la mujer que se queja en una carta de los crecientes besos, abrazos y aproximación corporal en nuestra sociedad. Yo también tuve una educación negadora de mi ser corporal, por una madre reprimida y angustiada, que hizo así infeliz a su marido e hijos, rechazando las naturales expresiones de afecto que no fueran puramente “espirituales”, víctima de una moral antinatural, maniquea, que identificaba casi todo lo corporal, para no hablar de lo sexual- con algo bajo, sucio, pecaminoso. Pero, aunque sea lenta y trabajosamente, hoy vamos liberándonos de esa perversa y antinatural mentalidad que llegaba a confundir e identificar, incluso lingüísticamente el practicar el amor con el jorobar al prójimo.
20081119. Robar hasta el techo.
Robar está mal; pero robar a los más pobres y desvalidos, a los hambrientos, es de una especial perversidad; y lo malo no es denunciarlo, que es una obligación moral, sino el que sea así. Auténtica cueva de ladrones sin escrúpulos, la cúpula de Barceló en las Naciones Unidas en Ginebra es una gigantesca y sangrante prueba del robo y engaño de un Gobierno que pretendía comprar nuestra aprobación con un “aumento” de la Ayuda al Desarrollo, lo que ha resultado ser un robo hasta el mismísimo techo, una monumental estafa.
A la movilización ciudadana le toca actuar para convertir ese mal en bien, exigiendo, por todos los medios legales, -entre otros, en la calle-, una transparencia adecuada en éste, como y más si cabe que en otros destinos de nuestros impuestos, y un adecuado castigo a los culpables. Y las ONGs deben contribuir a esa movilización. Ya lo empiezan a hacer algunas de las más solventes, mientras que otras revelan, con su pasividad, su complicidad con un Gobierno que las compra y corrompe para que no le fiscalicen como debieran.
El colmo del cinismo es que, en el mismo acto de inauguración de este gigantesco expolio a los pobres, Zapatero, intentando tapar esa barbaridad diciendo otra mayor, acaba de afirmar que esa reforma quiere expresar el compromiso español “con los Derechos Humanos, el multilateralismo y la defensa de la paz”. ¡Ah, bellas palabras!¡Cuántos crímenes se cometen en tu nombre!