20210202. Ser Gobierno y oposición.
“No podéis ser oposición y Gobierno. Tenéis que elegir”. Imprudentes, suicidas palabras las de la portavoz del PSOE a UP, que Adriana Lastra tendría que aplicar también al PSOE, que así revela sin querer creer que es “el” Gobierno, con una cabezonería por imponerse tan dañina como la que con razón el PSOE atribuye a UP.
Para que funcione mínimamente el sistema, sin las pésimas consecuencias finales de González y de Rajoy con sus mayorías absolutas, todos debemos gobernar siempre, no sólo el o los dos o más partidos que oficialmente lo hagan. También deben contar, en su proporción, por supuesto, los que representan a la oposición oficial e incluso los ciudadanos que, por no encajar con ningún partido parlamentario o por su marginación por otras causas, no han votado, pero constituyen con frecuencia el grupo mayoritario.
20210223. Manifestación contra Irene Montero.
Este fin de semana -y no es la primera vez- ha tenido lugar una protesta ante su Ministerio, en broma todavía calificado “de Igualdad”. Varios grupos feministas han acudido para denunciar su proyecto de ley que permitirá, con sólo abrir la boca para afirmarlo, convertir a los varones en mujeres.
Con esa milagrosa TRANSformación, esta ambiciosa política intenta aumentar con ex varones el número de sus seguidor@s incondicionales, tras haber conquistado y secuestrado de hecho al jefe nominal de su partido y obligado a cambiar al femenino el nombre de su organización e incluso haber proclamado que pronto una mujer (ella, por supuesto) lo gobernaría.
Es un audaz paso más a favor de la separación, enfrentamiento y victoria sobre los hasta ahora enemigos de la mujer, a los que afirma ser los biológica y por tanto irremediablemente agresivos varones, que Irene Montero -quien sabe por qué trauma infantil- pretende poner a sus pies. Para ello nos está intentando encerrar legalmente, con la ayuda de sus huestes de resentidas monjitas laicas, en un esterilizante puritanismo que va dejando ya en ridículo en algunos aspectos al sofocante corsé del antiguo régimen.
20210310. Irene Montero, de lo peor.
Muchos años antes de que naciera esa funesta política, quien suscribe había publicado varios libros y emprendido muchas campañas -visibles en las calles de Madrid desde hace décadas- en favor de las mujeres… y de los hombres, es decir, de la igualdad. No como esa pobre resentida, cuyo Ministerio de Igualdad sólo tiene como altos cargos a mujeres, después de haberse aupado al poder tras seducir, encerrar en la Sierra y atar con hijos prematuros en todo sentido, – hasta biológico-, a un político al que así está contribuyendo a hundir junto con su partido, ya unilateralmente feminizado en su mismo nombre.
Con razón, como cada día más ciudadanos, incluso un artista humorista como Josema Yuste acaba de denunciarla como “una enferma que no vive sin fomentar continuamente el odio al hombre”. Bien lo muestran sus huestes hasta en la calle, en manifestaciones de diverso tipo, en las que se imponen, incluso con karatecas femeninas con gestos amenazadoras en su cabecera, con cómplices que van rompiendo pancartas que piden la igualdad y amistad entre los sexos e incluso con agresiones personales, como tengo testigos. Su rencor y sus ansias de poder unilateral está partiendo y enfrentando del modo más íntimo, cruel y total a las dos Españas biológicas. No podemos callar ni tolerar más que desde el Gobierno ella fomente el odio entre todas y todos.
20210315. Todos dormiremos mejor.
Tras la dimisión de Iglesias, todos dormiremos mejor. Empezando por P. Sánchez, que ya había hecho la fácil profecía de que tendría pesadillas si lo metía en el Gobierno. Pero mejor aún dormirá el mismo Iglesias, liberado por un lado de los escraches en la calle y por otro de las constantes exigencias de su mujer en casa para que le mantenga en un cargo que nunca había alcanzado sin ese ejemplo de nepotismo, tan vergonzoso como ridículo por auparla a un Ministerio de “Igualdad”.
20210509. Hablar mal de los muertos.
Los muertos parecen ser todos unos santos, por lo bien que se hablan de ellos. A veces por alivio ante su desaparición o por superstición; otras, más razonables, por temor a sus herederos. Sobre todo, cuando se trata de meras muertes políticas de muy vivos, que buscan con sus acólitos venganza en la sombra o descaradamente.
Esto último y más peligroso es el caso Iglesias, que tiene el descaro de decir que se va porque ya no suma y es un chivo expiatorio, cuando no ha hecho sino restar votos desde que acabó con los demás fundadores de Podemos, chivos expiatorios suyos, cambió sus estatutos en verano y se corrompió hasta Galapagar. Peor aún ha sido un Gabilondo, que no pudo hacerlo peor, ni cometer con su soberbia errores más rotundos, queriendo encima recoger su acta de diputado hasta que los suyos tuvieron que echarle a patadas hasta el hospital. Ojo con esos y otros falsos muertos, que todavía pueden hacernos mucho daño.
20210827. No somos tontos, Iglesias.
Bueno, es lo que hizo siempre y, ahora, lo que último le queda por hacer. Como si no fuera tan reciente y tan matemático como el número de votos, Iglesias insiste en su embuste inicial de que se ha ido “porque ya no sumo”. No es que no sume, sino que resta una barbaridad de voto. Intentando incluso mentira más gorda, el que ahora además que se va dedicar al “periodismo crítico” -vamos, mentiroso-, la ha dicho aún más gorda: “había personas que sumaban más”, como si el hubiera sumado algo y no restado”.
Sin embargo, como se coge antes a un mentiroso que a un cojo sin ortopedia, Iglesias ha reconocido ante el entrevistadora Basté -que, siendo de su cuerda, no le dijo antes un “¡basta!”- que lo suyo ha sido “un desgaste evidente”; vamos que este “académico” (profesor, que no catedrático) parece ignorar que “desgaste” es perder, restar, como fueron ahí los votos de ese máximo destructor de Podemos.
Más grave aún, porque afecta directamente al futuro, es su que vuelve a su también tan descarado, como también, para que cuele algo, embuste que “Cuando uno se va, no puede eclipsar o molestar a los que se quedan. Si te vas, te vas”. Hasta el menos informado de cómo y a quienes se hizo el traspaso en Podemos presentaría eso para ganar el premio al mejor chiste de humor negro. Vamos, que si antes se decía que uno “tenía más cuentos que Calleja”, hoy la Iglesia podría presentar a Iglesias un pleito por usurpación y degradación de su marca.