200004XX. El populismo en Venezuela.
“¿De qué ha servido la Emancipación si ahora también compran tu voto?” decía un escéptico a un antiguo esclavo negro en los Estados Unidos, después de 1860. “Para que ahora, al menos, me paguen el voto a mí, y no a mi amo”, respondió éste. Siglo y medio después, un venezolano pobre también respondía al periodista: “Será populismo lo de Chavez, pero es la primera vez que me llega algo de los beneficios del petróleo”. Muy curiosas son las críticas al populismo venezolano por parte del Partido Popular español, miembro del Partido Popular Europeo: el populismo sólo les desagrada cuando no son ellos los que sacan, y prácticamente entera, la tajada de ese negocio.
Profesor de sociología durante largos años en Venezuela, permítaseme recordar que la política no es el arte de crear el paraíso en la tierra –según pretenden los integristas a izquierda o derecha- sino, mucho más modestamente, de escoger entre lo que es malo y lo que en España hace poco, con una exactitud comprobada en tres sucesivas elecciones en un año, se ha denominado como P.Peor; es decir, en este contexto, el Populismo Peor.
20000704. Buenas elecciones en Méjico.
«¡Que viva México!» Permítase desde la Vieja España a un viejo conocedor y amigo de la Nueva España felicitar a toditos los mejicanos, por haber sabido culminar tan bien esa etapa histórica de cambio tras los 71 años del PRI. Al vencedor, Fox, por su probada moderación tras haber conseguido un triunfo electoral que tantos consideraban imposible, y con un margen tan grande que hace más fácil la transición. Al PRI y, en particular, a Zedillo, por haber propiciado unas elecciones más equitativas y democráticas que han facilitado esa misma transición, así como por su promesa de colaborar al tan difícil traspaso de poderes.
No ha ganado un partido, sino todo Méjico. Mucho puede hacer, con la ayuda de todos, el PAN de Fox. Y mucho podrá colaborar un PRI, tras un profundo y casi inevitablemente lento proceso depurador, que le devuelva los grandes valores que tuvo, hasta recuperar, esperemos más por méritos propios que por defectos del PAN, el gobierno de un Méjico cada vez más justo e igualitario, mejor.
20001119. Castro y ETA.
No es escandaloso, sino lógico, que Fidel Castro se haya desmarcado de la condena a ETA de la Cumbre Iberoamericana, al pretender que se condenara también a quienes luchan contra su tiranía. Lo que sí es muy vergonzoso es que la presión democrática internacional no haya obligado a rendir cuentas hace decenios a ese dictador; al contrario, ha contribuido decisivamente a mantenerlo en el poder con su «comprensión», estimando, con refinado racismo, que su régimen es bueno… para cubanos. Y ahora se atreven a mendigar que Castro les apoye contra ETA «con su autoridad moral e histórica», según ha tenido la incalificable ocurrencia de decir Anasagasti.
Esperemos que la instauración del Tribunal Penal Internacional acabe con esos salvadores de la Patria. Muy significativa fue ya la actitud de Castro cuando primero aplaudió la detención de Pinochet en Londres, para desdecirse en 24 horas, por lo que esa detención podía tener de precedente para él mismo.