Cartas a la prensa – Economía – 2007

20070211. Estúpido derroche ministerial.

He visto en TV1, a las 22 horas del 9 de febrero, un largo anuncio invitando a votar por correo el Estatuto de Andalucía, pudiendo pedirse… hasta el día 8. Yo sé que al Ministerio del Interior le importa poco gastar ese pastón nuestro, y que se siente intocable. Pero me gustaría que algún día funcionara la democracia y se impusiera a los responsables de ese dispendio, de esa malversación de caudales públicos, una multa que remediara en parte ese estúpido derroche y sirviera de ejemplo para otros ineptos o irresponsables.

20070222. Burocracia de supermercado.
                                Necesitando un complemento para mi ordenador, fui a unos Grandes Almacenes donde, después de echarse la pelota para no atenderme cuatro empleados, tuve que esperar a un quinto, que cuando por fin llegó mostró una ignorancia total respecto al tema. Por si esto fuera poco, me condujo para pagar ese producto a una caja especial, no la de salida, y donde tampoco estaba “de momento” la persona encargada de la Caja. Al quejarme de tanto tiempo perdido, el ese quinto dependiente tuvo la “amabilidad” de recomendarme que tuviera paciencia en la nueva espera.

               Al no llegar la persona de la Caja tras un cierto tiempo, tuve que comprar el complemento en una tienda especializada en informática, donde la espera es razonable, estando siempre los empleados real y visiblemente empleados en atender a los clientes, con una atención adecuada y, por supuesto, educada. En cambio, la actitud de los dependientes de ese supermercado me recordó al campo… de los antiguos países comunistas, en donde imperaba la burocracia y el desinterés.

20070314. Al rico ladrillazo.

                            La mayoría de nuevos multimillonarios españoles, hasta un total de once, que aparecen en las listas de los más ricos del mundo, no lo deben a sus trabajos y servicios a los ciudadanos, sino, por el contrario, al mero haber especulado y encarecido un artículo de primera necesidad como es la vivienda, hasta dejar en la calle, a “ladrillazo” limpio, a centenares de miles e incluso millones de sus conciudadanos, mientras más de tres millones de pisos permanecen vacíos. 

                            Sólo la proliferación de “ruidos” que nos distraigan de ese expolio sin precedentes –creando o exagerando otros escándalos deportivos o políticos, por ejemplo- puede explicar que nuestra sociedad esté reaccionando tan lentamente contra tan enorme y generalizada injusticia, que distorsiona incluso el conjunto de nuestro sistema económico, al obligar a hipotecar durante muchos decenios la mayoría de los recursos de gran parte de la población sólo al sector inmobiliario.

20070329. Sin casa e insultados.

                          Algunos de los que se han enriquecido encareciendo un bien de primera necesidad como es la vivienda intentan ocultarlo y confundir a la opinión pública con cartas a la prensa en las que califican de “zánganos” a sus víctimas, que nos hemos manifestado en toda España reclamando una vivienda digna a precio justo. Quienes así nos insultan no pueden ser sino tales estafadores, porque ninguna persona en sus cabales puede ignorar que el precio de la vivienda, a pesar de su abundancia, ha aumentado hasta el triple, y más, en pocos años. Nosotros no pedimos pisos gratis, de limosna, sino a un precio honesto, que puede y debe ser muy inferior, hasta sólo una cuarta o quinta parte del precio hoy “normal”, como demuestran los muchos pisos edificados por un constructor de Fuenlabrada de los que han informado estos días los medios de difusión.

20070329. Arquitectos con miedo.

                            El argumento mejor elaborado cae en el ridículo cuando se enfrenta a hechos comprobados. Y pocos hechos son tan cifrables e indiscutibles como el que el precio de la vivienda bajó en Estados Unidos un sexto el año pasado, y dos tercios, en los 90, en Japón. El “argumento” del arquitecto Carlos Bajo de que no puede bajar porque eso no interesa a los bancos, que “son los jefes” huele, pues, a rancio marxismo vulgar o a terrorismo ideológico pro sistema. También parece falsa caridad cristiana su conmovedora compasión hacia “muchos jóvenes que acaban de comprarse un piso”, a los que –pretende- se les “revuelve el estómago” ante el temor de que bajen; porque en realidad, o entonces renegociarían con fuerza su hipoteca a la baja, señor Bajo, o simplemente “regalarían” el piso al banco y comprarían otro mejor y a menos precio. Por eso tantos miles de jóvenes y no tan jóvenes, que no son tontos, acaban de salir a la calle pidiendo que bajen los pisos, sobre todo en Barcelona, lo que quizá ha alarmado y movido a escribir a mi paisano Bajo. Porque a los que sí se les revuelve el estómago, señor arquitecto Bajo, es a tantos de su profesión, que se aprovecharon con bancos y especuladores en general del boom inmobiliario, sin ahorrar para cuando llegaran los años de vacas flacas, y ahora intentan exorcizar con sofismas pseudo económicos la inevitable vuelta a un régimen más justo y sostenible respecto a la vivienda.

20070424. Derrumbe esperanzador.


Pocas veces un movimiento bursátil, y encima a la baja, ha tenido un significado tan positivo para tantos millones de españoles. Precedido, como los movimiento sísmicos, de muchas e inequívocos signos, este terremoto económico, este “derrumbe”, como muy acertadamente lo han calificado los expertos en la Bolsa, de los valor de algunas de las principales inmobiliarias, derrumbe que ha superado ampliamente los dos los dos dígitos, es la primera de las grandes sacudidas que se irán inevitablemente sucediendo hasta conseguir un nuevo y mayor equilibrio del mercado, tan descentrado e inestable al haberse inflado cancerígenamente los valores inmobiliarios hasta tres veces más su precio normal. Pasados los primeros sobresaltos, y los ajustes dolorosos que en parte afectarán a no pocos inocentes, la situación volverá a una situación mucho más favorable para el conjunto de la población, que recordará en el futuro esta fecha del 24 de abril como un hito memorable en el derrumbe de la aplastante dictadura del ladrillo sobre nuestra economía.

20070426. Engaños sobre la vivienda.

Todavía ayer, hace pocos meses, el presidente español del “Meeting Point” europeo sobre la vivienda tenía el valor de poner a España como ejemplo del mejor negocio inmobiliario… para los especuladores. Y las autoridades tampoco tenían empacho en suspender una Cumbre internacional sobre la vivienda en Barcelona, por miedo a unos posibles disturbios de incontrolados, como aducían, o por su justificado temor a enfrentarse a las cada vez más duras críticas de tantos esquilmados ciudadanos.  Incluso ahora, con el cifrado e indiscutible desplome en la bolsa de los valores de algunas de las principales inmobiliarias, el vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes, pretende que eso es un hecho puntual, una anécdota, vamos, que nada tiene que ver con la marcha del sector de la construcción y de la vivienda. Como en otros tiempos, hay que recurrir a fuentes extranjeras realmente solventes, como el Financial Times de Londres, para confirmar lo evidente: que esa estrepitosa caída muestra “todos los signos de una burbuja a punto de estallar”, porque los “mercados peligrosamente inflados no duran para siempre”.

20070503. Famosos delincuentes.

                               Que me perdonen el que les mezcle en esto los que sólo son delincuentes de menor cuantía, los que roban para comer ellos o su familia, los marginados que se resarcen así en parte de su mala suerte. Los grandes delincuentes son aquellos que, sin necesidad, ni perentoria ni cercana, mimados merecidamente o no por un público amante de las artes, la música y el cante, el lugar de agradecer su suerte y cuidar su reputación, aprovechan choriceramente su fama para robar más y más a todos.

                               El caso de la Pantoja es estos días “ejemplar” y especialmente odioso, por haber colaborado tanto y tanto tiempo a encarecer ilegalmente un bien de primera necesidad como es la vivienda, por haber blanqueado capitales con compras de suelos y ganado y por haberse sustraído a la contribución debida por todos a las cargas fiscales. Con razón, incluso antes de ser detenida oficialmente por la justicia, ha sido perseguida públicamente ya, como en Guadalajara, cuando se ha atrevido a presentarse como artista después de haber emprendido tan descaradamente, queriéndose amparar en el arte, su nueva gran carrera de estafadora. Y encima tiene el valor hoy de declararse “sorprendida” de que por fin le haya llegado su hora. Cuanto mayor sea su fama, mayor debe ser el castigo social y penal que reciban estos famosos delincuentes.

20070514. Pésimas políticas de ladrillo.

                             ¿Cómo podremos creer que Zapatero va ha solucionar, o al menos aliviar, el gravísimo problema de la vivienda, que va a perseguir de modo “implacable” la corrupción, si habla de “política del ladrillo” sólo en singular, achacándole todo el mal sólo al PP?  Todos fuimos testigos por televisión de su poca voluntad política, desmentida allí mismo por los hechos. Porque cuando unos jóvenes desplegaron en su mitin una pancarta que decía sólo: “Casas sin gente, gente sin casa”, en vez de concebir ese gesto como un apoyo a su política, se interpretó como una crítica, y formándose un tumulto difícil de aplacar. Y ese mismo día, el delegado de su Gobierno en Madrid prohibió, con un despliegue tan costoso como intimidatorio, una protesta tan pacífica y justa como es una acampada para reclamar el derecho constitucional a la vivienda. Cuando el PSOE quiera resolver de verdad el problema, deberá comenzar por dar ejemplo, por purgar su propio partido de los culpables de ese enorme encarecimiento de la vivienda.

20070706. Qué reivindica Hidalgo.

                         Para salir en la foto, acabamos de ver a Fidalgo arrimándose a la manifestación de los homosexuales, ahora que esa minoría ha conseguido por su cuenta muchas de sus reivindicaciones; y reivindicando el fumar ostensiblemente en público, para que se vea lo que le importa a ese médico reciclado de secretario de CC.OO. la salud de los trabajadores y de los demás. Y, sobre todo, no le vemos, como era su principal deber, encabezar también manifestaciones contra la enorme injusticia, recién puesta de relieve en los medios, de que España sea el único país de la OCDE en donde ha bajado el salario medio durante este período de fuerte auge económico, y ha aumentado la diferencia entre lo que gana el veinte por ciento más rico y el más pobre. Pero ¿cómo va ha protestar por este desastre social, si el mismo Fidalgo ha sido un elemento imprescindible para que haya podido producir ese retroceso en los derechos de los trabajadores que debiera haber defendido?

20070918. Política Banco Europeo.

                             Por fin un presidente, aunque sea un Sarkozy que no me gusta de ordinario, ha protestado por lo evidente: que con el dinero de todos nosotros, el Banco Central Europeo haya favorecido a los especuladores, en vez de bajar los tipos de interés, en la reciente crisis de las hipotecas. Hecho que ese Banco no puede desmentir, respondiendo sólo, sin argumentos, que está al servicio de los ciudadanos. La democracia económica, como, o más si cabe que la política, pide una constante vigilancia de una ciudadanía ilustrada, que no se contente con ir deshogándose después en el “muro de lamentaciones” de los cafés.

20070921. ¿Víctimas o verdugos?

                                  Rectifico: catalán no independentista, antes defendía la libertad de expresión del ERC, cuando la fiscalía les acusó por quemar una foto del rey, modo de protesta discutible, pero corriente en países democráticos. Pero ahora me entero que en aquella manifestación se profirieron gritos y hubo pintadas amenazando de muerte física al rey, lo que convierte a esas personas de víctimas en verdugos. Eso sí que debe ser perseguido judicialmente en una democracia, y pido por tanto a la fiscalía que también ella rectifique denunciando lo realmente delictivo, la incitación a la violencia.

20070921. Peligro para los consumidores.

                              Por desgracia, los engaños a los consumidores, incluso atentando a su salud, no son cosa sólo de productos fabricados en la lejana China, al amparo de prestigiosas marcas estadounidenses. Por mi edad y achaques quise tener este verano un aire acondicionado, pues vivo en un ático orientado a poniente. Recurrí a una marca que presume de ser fuerte como una ”ROCA”. Pero su aparato, como si fuera una mala radio, emite todo el tiempo, unos fuertes y discontinuos ruidos que me impiden dormir.  Los especialistas de la marca, que vinieron a mi casa, (tengo documentos de ello) reconocieron que es defecto de fabricación, como resulta evidente porque otro aparato igual que instalé en el comedor también tiene ese defecto, pero se negaron a repararlo o cambiarlo. Y yo sin poder descansar, debiendo recurrir al médico… y a la prensa libre, para reclamar justicia y advertir a los demás consumidores de lo que les espera si confían en ellos.

20071105. Reajuste del precio de la vivienda.

                          En sólo el mes de octubre, el precio de la vivienda usada de tamaño medio en Madrid y Barcelona ha bajado en unos diez mil euros. Ahora que cada día llegan datos parecidos en ese sentido, los organismos nacionales e internacionales, que no intervinieron a tiempo, nos advierten de lo que todos ya sabemos: que el precio tan abusivo de la vivienda es insostenible. Esperemos que, funcionando los mecanismos de la oferta y la demanda, la proliferación cotidiana de tantos carteles de “Se vende” en ventanas y portales, cada vez más grandes, y algunos ya muy envejecidos,  contribuya pronto a que la vivienda recupere unos precios adecuados, similares a los existentes antes de su injustificada multiplicación.

20071105. Revolución hipotecaria

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                    ”Revolución es tener hasta 40 años para comprar tu casa”. Estoy completamente de acuerdo con esta afirmación de un gran banco, que otros han superado ya “ofreciéndonos” hasta por 50 años. Es una auténtica revolución que reinstaura del modo más barato, más proficuo para el amo, la esclavitud de por vida, el trabajo agotador, el exacto cumplimiento de todo tipo de reglas, por temor a fallar una mensualidad. ¡Abajo las arcaicas e improductivas cadenas tradicionales! Los nuevos señores feudales signan un trocito de tierra, incluso en altura, a cambio de lo mejor de la cosecha económica. De la revolución hipotecada hemos pasado al rotundo triunfo de la revolución de la hipoteca. Hundidos los pies en el cemento, como hacía la mafia tradicional de Chicago con sus víctimas, aquí no hay quien se mueva sin el permiso de los dueños del sistema.

20071216. Petróleo con dignidad.

                                          “Poderoso caballero, es Don Dinero”. Hoy Quevedo añadiría unos versos sobre el poderosísimo Don Petróleo. Pero sería deseable que nuestra economía, industria y transporte funcionara, sí, con petróleo, pero sin renunciar por ello a mínima dignidad, como saben hacerlo otros países europeos, a los que, por añadidura, ese salvar mejor la cara les resulta también rentable en el aspecto económico.

                                            Porque, la verdad, es que la historia reciente española al respecto es de lo más bochornosa, ya se mire a derechas o a izquierdas. Esperemos que la visita del dictador petrolero Gadafi, ante el que un día doblaron el espinazo hasta algunos conocidos izquierdistas, no tenga tintes tan vergonzosos como la aún reciente visita de Obiang, que provocó una sana reacción interparlamentaria de rechazo a su recepción en el Congreso. Y todavía padecemos las secuelas del increíble alineamiento con Bush, en su guerra por el petróleo iraquí, prometiéndonos entonces una ministra de Aznar que tendríamos un petróleo diez veces más barato de lo que hoy, nosotros y otros países, lo estamos pagando. Para no hablar de las décadas de vergonzosa pleitesía –incluso por las más altas instancias del Estado-ante el dictador y sembrador de terrorismo Fahd, de Arabia Saudí. Petróleo sí, pero, repitámoslo, con dignidad.

20071223. Bajan las ventas por la carestía de la vivienda.

Se quejan, con razón, los comerciantes de que en estas fiestas han descendido mucho sus ventas. No podía ser de otra manera, cuando un número creciente de hogares tienen que dedicar la mayoría de sus ingresos a pagar unas desorbitadas hipotecas de las viviendas.

El haberse triplicado y más su precio –que no su valor– en pocos años no sólo ha constituido el mayor abuso y expolio a la ciudadanía que conoce nuestra historia reciente, sino que, por eso mismo, sustrayendo el ladrillo demasiados ingresos a los sectores agrícolas, industriales y de servicios, abocándoles a una crisis cada vez mas insoportable en un tan desequilibrado circuito económico.

No es de extrañar, pues, que cada día los expertos nacionales e internacionales nos alerten del problema, y que las calles de toda España se llenen de manifestantes que, como volverá a ocurrir este domingo 23 de diciembre, hacen patente su protesta ante lo que nunca debiera haber sucedido con un elemento de primera necesidad como la vivienda.