Cartas a la prensa – Ecología – 2007

20070314. El oscurantismo en Madrid.

                             Era costumbre el dibujar sobre la cabeza de una persona una bombilla encendida para indicar que había tenido una idea brillante. Se diría que intuían la brillantísima idea –en sí y como ejemplo mundial- que ha tenido Australia, sustituyendo todas las bombillas tradicionales por las nuevas, que iluminan más, contaminan mucho menos y se amortizan económicamente por su bajo consumo en un año.

                            A las antípodas de esa conducta ejemplar, como lo está Australia de Madrid, tenemos aquí a un alcalde que este año ha aumentado nada menos que en un cuarenta por ciento (40%)  el número de bombillas tradicionales que durante dos meses han contaminado por “Navidad” nuestras calles, aunque después haya tenido el gesto hipócrita de sumarse a última hora al apagón mundial ecológico, apagando por cinco minutos la iluminación de la Puerta de Alcalá. Como si así pudiera oscurecer y ocultar su real,  masivo y antiecológico derroche lumínico a costa de nuestro dinero y salud, como otras obras suyas, descaradamente concebidas y ejecutadas para las elecciones, no para, sino contra los ciudadanos de Madrid, víctimas de innumerables atascos, sobrecostos y una ilegal contaminación ambiental. ¿Llegaremos por fin a un siglo de las luces… adecuadas, o continuaremos padeciendo un cada vez más nefasto despotismo falsamente ilustrado? ¿Triunfará todavía en nuestra así sufrida ciudad  ese oscurantismo real, político, del Madrid de Gallardón?

20070702. Sorprendentes y bárbaras contradicciones.

                            Sí, quizá sea noticioso, precisamente por lo que tiene de tan contradictorio, y que lo hace tan nocivo y lamentable, el que un brujo africano utilice un moderno helicóptero para difundir mejor sus supersticiones y sus más que dudosas “curaciones”.

                               En modo parecido, lo es también el que el Ayuntamiento de Pamplona esté empleando ahora la más moderna tecnología del teléfono móvil, como ya antes la radio y la televisión, para difundir ese bárbaro rito prehistórico que deja todos los días heridos, y de vez en cuando muertos. Y eso, entre los que tan exageradamente presumen ser animales racionales, además de terminar siempre ese espectáculo sangriento con el largo y cruel tormento público, hasta la muerte, de los -en clara proyección freudiana- calificados como “bestias”.

20070713. Aire ilegal.

                             Sin desmerecer otras, me pregunto cuántas manifestaciones podrían unir de verdad a todos los que residimos en Madrid ante un problema vital personal, que nos roba a cada uno más de dos años de vida. Porque eso es lo que, según datos científicamente comprobados, nos sustrae la contaminación atmosférica, sustituyendo el aire por un gas venenoso, la tristemente famosa “boina”, según los últimos datos registrados, recién subrayados por unos pocos manifestantes contra ese “aire ilegal”. ¿Hasta cuándo el silencio, o incluso los argumentos para resignarnos, como el “es la costumbre” (no: cada vez es peor) o “pasa en todas partes” (no ya en los países punteros), sofismas fomentados por algunos poderosos intereses asociales… y suicidas, prevalecerán sobre el instinto de conservación ilustrado?

20070729. Insensibilidad.

                            No se trata de un caso aislado, no. El que en la plaza de toros de Las Ventas se haya organizado un homenaje al padre descerebrado que llevó a correr el encierro de Pamplona a su hijo de diez años prueba que una parte importante de los taurinos tienen una sensibilidad muy distinta de la de la gran mayoría de los españoles, que rechaza decididamente ya esos espectáculos, aunque el aumento general del nivel de vida, y la morbosa curiosidad de algunos turistas que nos visitan los mantengan aún vigente para bochorno de todos.

20070820. Gamberradas turísticas.

                          Se cuenta que, siendo Fraga ministro de Información y Turismo, una inglesa telefoneó preguntando cuando sería el próximo “Auto de Fe”, pues quería disfrutar de una quema de herejes. Sin llegar a tanto, algunas salvajadas locales contra toros, cabras o gallos perviven aún con excusa de que fomentan el turismo más morboso; es decir,  manchando por dinero la reputación de nuestro país.

                        No contentos con destruir salvajemente animales, se ha llegado a fomentar, hasta hacerla tristemente famosa, la enorme gamberrada de destruir irracional y masivamente vegetales. Y cada agosto vemos repetirse en el valenciano pueblo de Buñol el bochornoso espectáculo de tantos irracionales revolcándose por los suelos entre restos de toneladas de tomates reventados. Algunos los comparan injustamente con los cerdos, cuando en realidad estos animales sólo se revuelcan por necesidad, para librarse de los insectos, y sin destruir deliberadamente alimentos costosos –e incluso subvencionados por todos-,  que podrían servir para paliar el hambre de algunas de los  millones de personas que cada año mueren por desnutrición.

20070904. Cambiar ante el cambio.

                                España es de los países, según todos los expertos, que antes y peor va a sufrir los peores efectos del cambio climático, la desertización. Los españoles, lógicamente, somos de los más alarmados ante lo que se nos viene encima, según constatan las encuestas. Sin embargo, somos de los que menos hacemos para prevenirlo. Quizás esperamos que la lotería de Navidad resuelva nuestros problemas.

20070922. El angelito y su amigo.

                          Taurinos o no, estamos todos de acuerdo en que hay  que tener la elemental valentía y decencia de enfrentarse a sus propias responsabilidades. Porque Serrat y Sabina, para promocionarse, se dieron el “paseíllo” en una sonada corrida de toros.  Pero como sus clientes, sus “fans”, son casi todos antitaurinos, sufren desde entonces fuertes críticas, desde e-mails de protesta hasta pancartas que gritan ante sus conciertos, con un rotundo “SERRAT-SABINA, TORTURA-TOROS”; “Unos cantan en Irak, otros van a corridas”, etcétera.

                         En vez de rectificar o ratificarse en sus actos, de dar la cara, ahora, intentando engañar a todos, y comer a dos carrillos, Serrat balbucea que fue a la plaza de toros… sólo por acompañar a su amigo Sabina; vamos, como Aznar fue a Irak sólo por su amigo Bush. Y Sabina perjura que sólo va a las corridas en memoria de Goya o Hemingway, pero que está contra todo maltrato a los animales, el angelito. ¡Vaya con el angelito y con su amigo! En unos jóvenes, eso sería una lamentable inmadurez; en hombres más que medio centenarios, esa cobardía, ese cínico intentar reírse de todos es, además, de una espectacular desvergüenza.

20070924. Valor… periodístico.

                            Hay que tener valor… torero. Tras la figura de un viejo e incombustible funcionario (¿ex?) franquista, la foto revela, sin querer, que las  gradas de la plaza están vacías en más de sus dos tercios. Pero el artículo que la acompaña en un diario madrileño, dando un magistral quite al ABC sobre la objetividad periodística, empieza con un: “Otra vez la Monumental llena a rebosar”. Y  rellena esas gradas vacías con nombres ilustres como, es cómico, Boadella, Trapote (sic), etcétera. No, esta vez no están haciendo teatro ahí Serrat y Sabina, a los que, al dar juntos “el paseíllo” por la piel de toro española, sus ex fans les han cantado las cuarenta, como “tortura-toros”.

20070927. Dañinos días sin coches.

                              Algunos ecologistas inmaduros se quejan amargamente del fracaso del “Día sin Coches”. Aún no se dan cuenta que esa iniciativa es una trampa montada -como las Saturnalias romanas en que, por un día, los esclavos hacían de amos- para que su fracaso impida concentrarse en controlar como se debe los excesos en su utilización, que resulta hoy imprescindible. 

                              Abusos son, por ejemplo, esas costosísimas y tan contaminantes carreras de autos, que “educan” a tantos de jóvenes, identificándose con sus “conductores”, a utilizar la velocidad de los vehículos como elemento de autoafirmación, hasta morir y matar o desgraciar de por vida a tantos miles de personas.

                              Sin embargo, por pedir una abolición total de los coches, utópica y nociva, esos ecologistas despistados, -que para esos “Días sin Coches” una proporción muy superior al resto de la Unión Europea-, descuidan la tarea positiva que pudieran y debieran realizar en este terreno.

20071023. El cambio climático PPeor.

                         Las explicitas palabras de Rajoy muestran que, en el fondo, le importa un pimiento España y los españoles. Los españoles, porque somos –ahí están las encuestas- los europeos más preocupados con el cambio climático. España, -palabra que no quita de su boca, para buscar un empleo de presidente- porque de hecho será el país más afectado en Europa por el cambio climático.

                         Aunque no se fuera a dar el cambio climático, contra el consenso ya casi unánime de los científicos, Rajoy debería haberse empapado de datos serios sobre el tema, para ilustrarnos con algo más que sobre ETA. Y no mostrar ahora su supina ignorancia, hasta llegar a confundir, con un primo por medio, el clima con el tiempo que hará mañana en Sevilla, para concluir que no sabemos nada en serio. ¡Menuda proyección freudiana la de Rajoy, atribuir a todos el no saber nada al respecto! ¡Pobre España, y pobres españoles, sin caemos bajo el mando de este indocumentado y superficial político! Es peor aún que Bush, que ya ha rectificado en este campo. Su irresponsabilidad me recuerda al ya, por fortuna, ex presidente Aznar, cuando pontificaba también que nadie tenía derecho a limitar su velocidad al volante (ya conocemos cuantas multas acumulaba, a cargo del PP), ni al beber antes de conducir; para no hablar de cuán indocumentadamente nos metió en la guerra de Irak.

                           Muchas críticas debo hacer al PSOE en este y otros terrenos, pero estas, como otras declaraciones y gestos de Rajoy, me confirman que el PP tiene un clima político más deficiente aún, y sigue siendo, como decían algunos ante las últimas elecciones, el claro PPeor.

20071031. Incoherencia “ecosuicida”.

                                   Faltos de mejores argumentos, algunos de los que habría que llamar “ecosuicidas” intentan desacreditar el peligro del cambio climático por la incoherencia personal de uno de sus popes actuales, Al Gore, cuyo hogar contamina mucho. Por supuesto, la incoherencia se da en personas de todas las ideologías, y ese argumento no prueba nunca nada. Es como si quisiéramos descalificar sin más a la religión porque algunos de sus dirigentes, predicando la caridad, y habiendo tanta pobreza en el mundo, “viven como curas”.

20071105. Tras la rectificación de Rajoy sobre el clima.

                         Honra a Rajoy el haber rectificado sus declaraciones sobre el cambio climático; máxime cuando algunos lacayos suyos todavía se empeñan en hacernos creer que no se equivocó, porque “el mayor problema del mundo” no es ese, sino el hambre, como si ambos no estuvieran ligados.

                        “El que tiene boca, se equivoca”. Claro está que una cosa es la simple valoración inadecuada de un hecho concreto, y otra la basada en argumentos que muestran deficiencias de formación. Oponer el cambio climático a un problema de contaminación, como si ambos no estuvieran también aquí íntimamente ligados, o confundir la meteorología (que llueva mañana en Sevilla) con la climatología, son hoy, o debieran ser, conocimientos básicos de cultura general.

                         Incluso en temas más complejos, a los grandes responsables políticos habría que pedirle tener y escuchar bien a asesores científicos específicos en cada punto preciso, aunque no sean primos, por más que sean catedráticos de otra cosa; y, más si cabe, esperar que tengan permanentes asesores políticos que, para evitar males mayores, les hagan rectificar pronto de sus eventuales errores; como los tiene Esperanza Aguirre, que no tardó ni 24 horas en escucharlos y rectificar su primitivo entusiasta apoyo a esas declaraciones de Rajoy. Y todos estos son problemas de fondo, para su partido y para España, que no pueden remediarse con una, aunque sea sincera, rectificación verbal.

20071113. Apagón para ver.

                             Parece paradójico el lema “Apagón para ver de vivir” que los ecologistas exhiben estos días, ese pedir oscuridad para dar más luz sobre el problema; pero hasta las compañías eléctricas están incitando ya a un “consumo responsable” de su mismo producto.  La cruda realidad es que este, como ninguno, “Siglo de las Luces”, según testifican las fotos por satélite, -que revelan también el alcance de la “contaminación lumínica” planetaria- corre serio peligro de desembocar en una Dark Age, una “Época Oscura” –como llamar los ingleses al Medioevo. Por eso debemos concienciarnos más del peligro, como intenta fomentar este simbólico y momentáneo “oscurantismo” del apagón mundial voluntario en casas y lugares públicos el próximo jueves 15 de noviembre, de ocho a ocho y cinco de la tarde.