Cartas a la prensa – Animales – 2018

20181013. ¡Hasta en la sopa!

                                       Uno de los carteles más celebrados en la manifestación anti independentista del 12-O en Barcelona reproducía el dibujo de un conocido humorista, en el que, ante una sopa con los colores de la bandera de los secesionistas un cliente exclama desesperado: “¡En la sopa no, por favor!”.  Según se ha comentado, tras cinco lustros de masiva y exclusiva propaganda del “Gubern”, hasta Mao se habría hecho capitalista, mientras que la mayoría de los catalanes hemos conseguido hasta ahora resistirla.

20181118b. Despeñar perros.

                              Una docena de perros se han despeñando con un ciervo al que perseguían en una cacería. No han faltado quienes, por respeto a la vida, han pedido ahora que se prohíba, como en países con mayor sensibilidad, el cazar utilizando a “el mejor amigo del hombre” (y la mujer). Avance civilizatorio quizá aun lejano, porque aún pervive la salvaje costumbre de matar a muchos perros de caza después de la temporada cinegética, como un acto normal.  Incluso en la carretera intercontinental que une en España a Andalucía con el resto de la península subsiste sin pudor el nombre de esta infamante costumbre: el desfiladero de Despeñaperros.

20181212b. Ladridos molestos.

            No pocos recordamos la época en la que si alguien recogía en la calle la caca de su perro se convertía en un candidato serio al manicomio; ahora, el que no lo hace es un candidato, y más serio, Al menosprecio social y a una multa

           En aquellos días los ladridos de un perro eran pocos y muy útiles para su dueño, al avisarle de alguna incidencia, resultando poco molestos para sus escasos y distantes vecinos. Hoy, en cambio, hay más y más cercanos vecinos con muchos más perros. También ladran mucho más, comunicándose con sus muchos más congéneres (por amor o competición) y con sus amos, en general para protestar por dejarlos con frecuencia, incluso atados, mientras van a trabajar o entrar en las tiendas. Sus ladridos multiplicados impactan en docenas o incluso cientos de vecinos, niños, ancianos, trabajadores nocturnos, y personas próximas en general

            La situación provoca enfrentamientos. Incluso algún desesperado ha propuesto cortarles las cuerdas vocales, lo que prefiero no adjetivar. Sin embargo, sería fácil educar a los perros a las nuevas circunstancias. Bastaría sisearles y tapar con un dedo la propia boca cuando ladren, poniéndoles un bozal si no obedecen. Gracias, en beneficio de todos.

29181219. Ni toros ni boxeo.

                                           Ha muerto la española María Jesús Rosa, pionera y campeona mundial de boxeo femenino. Lo siento y más por haber muerto a los 44 años y por una causa que no se revela, como siento la de los toreros muertos en la lidia. Pero en modo alguno me alegro de que ella haya fomentado un “arte” todavía mucho más brutal y mortífero, incluso para quien lo practica, que el torear. Pegar a otra persona por ganar fama o dinero hasta dejarla inconsciente, como ella hizo tantas veces, supone uno de los peores ejemplos, de las mayores barbaridades que puede cometer una persona. Al menos eso es lo que sostenemos con toda firmeza quienes profesamos un mínimo respeto a la humanidad, a la salud y hasta a la vida -que en el boxeo también se pierde a veces, dentro o fuera del cuadrilátero- por encima de las ventajas que a veces consiguen quienes se dedican profesionalmente a realizar esos actos incalificables. Nuestro rechazo se extiende también, por supuesto, a quienes con su aplauso e incluso apoyo económico como espectadores fomentan esa vergüenza que todavía desprestigia nuestra civilización.